CASTIGO
(CAPITULO 4)
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Mi padre no tardo ni los veinte minutos en atravesar la puerta de la enfermería, le dijo a las personas encargadas que el firmaría los papeles para que yo me fuera con él, así que no tarde nada en cambiar mi horrible uniforme por mi ropa polvorienta y llena de pedazos de hojas del día anterior, como siempre mi papa no había llegado solo, Jacob lo acompañaba, y yo casi quería convertirme en un avestruz y meter mi cabeza en el fondo del más profundo hoyo, para que el no me viera con esos ojos que me acusaban y juzgaban al mismo tiempo.
___ Gracias por venir tan pronto papa. ---- le dije algo avergonzada.
___ Ni me lo agradezcas tu castigo aun no empieza, así que vale más que te prepares, no solo empezarás una nueva etapa en tu vida sino que la llevaras a la práctica, tengo para ti un castigo ejemplar y que sirva de experiencia a las demás chicas del internado, creo que los chicos de la Push tendrán su ejemplo con Sam ------- pase saliva pesadamente en los ojos de mi padre estaba dibujada la desilusión, me había sorprendido que el supiera que precisamente Sam, hubiera estado conmigo.
___ ¿Cómo te enteraste que Sam me acompañaba? ----- el miro a Jacob y después a mí.
___ El padre de Sam es buen amigo mío desde la infancia, así como lo fue el padre de Jacob, te darás cuenta que no pasaste de incognito con gente que te conoce desde niña, ¿O sí? ----- ahora la vergüenza se convertía en una brasa en mi rostro cuello y pecho, creo que estaba tan roja que si me miraba en un espejo ni yo misma me reconocería, así que solo baje la vista y clavar la mirada en la punta de mis pies, encontrándolos muy interesantes en ese momento.
Mi papa firmo los papeles y en la puerta de la comisaria nos esperaba mi madre, Renee tenía una tierna sonrisa como siempre, ella era una mujer que tomaba los problemas como si fueran cualquier cosa, ella decía que si una solo dejaba pasar lo que dolía siempre seriamos felices, así que me deje caer en sus brazos exhausta y llena de pena y vergüenza por mis infructuosos actos del día anterior, yo seguía siendo virgen y ya era un ex convicta a mis diecisiete años, “Vaya la putona” grito mi voz interna amargándome más el maldito día.
Después de un corto viaje llegamos al internado que había fungido como mi hogar desde mi nacimiento, el cual no sabíamos con exactitud si era el mismo día en que Charlie me encontró en la puerta o unos días más, en fin lo celebrábamos ese día los trece de septiembre, lo chicos más pequeños que siempre me habían respetado y me llamaban señorita Isabella, ahora como me llamarían, la pendejita Isabella o me seguirían respetando igual, no logre sonreírle a la comitiva que nos esperaba en la entrada, solo baje de la pickup de Charlie y me fui a mi habitación, cerré el pasador y me tire en mi cama, disfrutando del colchón viejo y usado, el olor del detergente barato y mis colchas de retazos hechas por mi madre, pegue mis rodillas en mi pecho, envolviéndome en la colcha donde me sentía tan confortable y protegida, ya casi conseguía perderme en un profundo sueño, pero alguien toco fuerte la madera de la puerta, pensé que mi papa venia a seguirme con el sermón así que tuve que abrir.
___ ¿Te sientes bien? ¿Necesitas algo? ----- mi boca se abrió varias veces sin poder articular palabra coherente, la persona que mas me molestaba en el mundo estaba parada fuera de mi puerta y la verdad yo no tenía animo ni ganas de discutir con él.
___ ¿Qué es lo que quieres Jacob? Te puedo decir que no discutiré contigo. ---- el bajo la mirada sin retarme como siempre y yo me quede desconcentrada.
___ No he venido a pelear contigo Bella, solo bien haber si necesitabas algo, eso es todo, pero veo que no estás del mejor humor. ----- me sentí bastante ruda y demasiado antipática, así que me separe de la puerta brindándole la entrada.
___ Ten por seguro que no estoy bien Jacob, así que tienes como reírte de mí, no necesitas fingir que me estimas para que yo me sienta como una completa idiota. ----- era lo que necesitaba llorar para sanar mi vergüenza así que al sentir que Jacob me apretaba en su pecho llore como una cría, como nunca lo había hecho delante del, el que siempre disfrutaba de verme llorar, pues se lo concedía.
___ No me estoy riendo Bella. Ni siquiera me hace gracia por lo que estas pasando, y aunque tú no me lo creas, me preocupo por ti, y me dio mucho miedo que te hubiera pasado algo cuando no llegabas, se lo dije a tu padre, y a Renee, pero ellos dijeron que eras una chica consciente de sus actos, y que pronto volverías. Tú no te imaginas el susto que nos hiciste pasar cuando la policía llamo, no te imaginas las cosas que pensamos cuando dijeron que estabas con un hombre, tú no te imaginas la rabia que sentí al saberte en los brazos de el imbécil de Sam ----- con cada palabra que Jacob pronunciaba yo me iba retirando de él, mi boca estaba abierta y mis ojos saliéndose de sus órbitas, Jacob me miraba con ojos tristes y eso casi me hace entrar en estado de shock, si eso era lo que me pasaba al reproducir sus palabras en mi cabeza, un shock nervioso, el llanto silencioso se convirtió en alarido y gritos de sorpresa y dolor, no sé cómo ni quien pero sentía como unos brazos me cubrían la espalda y me llevaban a la cama que sirvió para amortiguar los gritos y sollozos.
___ Isabella, te sientes mejor. ¿Isabella hija? ----- los ojos me pesaban y me dolían los parpados con la luz que entraba por la ventana, había perdido la noción de que hora o día eran así que solo alcance a medio abrir uno mirando a mi madre de pie junto a mí.
___ ¿Cómo te siente cariño? ¿Tienes hambre quieres algo de comer? ---- me talle los ojos, me mordí el labio y no quería mirarla a la cara, me daba algo de pena con lo que había pasado con Jacob como yo no me había dado cuenta de sus sentimientos así mí, yo era una completa idiota, era por eso que el siempre estaba pendiente de todo lo mío y era por eso que él quería saber todo, cerré los ojos y mi madre yo no insistió, era mucho para mí, así que dejaría que el tiempo pasada para aligerar la carga que sentía.
Las semanas siguientes fueron mucho para mí, Jacob no había vuelto a insistir con el tema de sus sentimientos y la verdad que yo no quería que él lo hiciera, después las cosas fueron peor pues no era suficiente portarme bien, le había demostrado a Charlie que podía ser una buena hija y obedecerlo en todo, pero ni así había conseguido su perdón del todo.
Los meses siguientes solo se hablaba de mi estancia en el que sería mi infierno de verano, un campamento donde niños problema iba a que se les educara, cuando los padres no podían con ellos, los folletos que me había dado mi papa me decían un poco de mi trabajo, yo fungiría como una tutora en cuestión de la alimentación de los chicos, pues había tomado cursos de alimentación y nutriología, y eso me ayudaría a desempeñar mejor mi trabajo, Charlie me había dicho que si conseguía tener buenos resultados con esos chicos, los padres de estos me recompensarían muy bien, y hasta podía llegar a ganar cinco de las becas que la fundación sorteaba cada año, así que me había mentalizado para ser una de las mejores tutoras de ese campamento.
___ ¿Bella estas lista para irnos? ----- había gritado Charlie por enésima vez, el tenía prisa por cumplir su castigó y llevarme de una vendita vez a ese horrendo lugar.
___ Si bajo en diez minutos. ----- grite al pie de la escalera, todas mis cosas se resumían a una pequeña maleta y mi reproductor de discos compactos, un sleeping bag y mi almohada, baje con paso lento cada peldaño de la escalera, mi mama estaba de brazos carduzados y la puerta principal y Charlie acelerando la pickup para que me apurara a salir, así que mejor para que hacía más largo el momento, al final Charlie había ganado y me llevaría como una presa a recluirme por tres meses a un lugar remoto en la montañas, con gente ajena a mi entorno habitual.
___ Deséame suerte mama, porque creo que la voy a necesitar. ---- ella me abrazo y deposito un beso en cada mejilla con los ojos llenos de lagrimas me despido al cerrar la puerta y dejarla dentro, ella solo me había dicho “te deseo lo mejor” pero no era suficiente para tranquilizar mi estado anímico.
Cuando llegue a la ruidosa pickup me quede parada como idiota, en el interior no solo Charlie estaba dentro sino que al volante estaba Jacob que sería algo así como el chofer destinado, Charlie salió dejándome el pase para quedar en medio de los dos, así que solté el aire pesadamente el recorrido por más de tres horas a paso de tortuga como conducía Jacob no adjuraba nada bueno, el silencio era demasiado incomodó así que cerré los ojos fingiendo dormir, y me pareció que en ocasiones si me había dormido pues el lugar ya no era el mismo cada que miraba por la ventana disimuladamente también veía a Jacob que tenia la mandíbula apretada y los pómulos marcados de la fuerza que realizaba con sus dientes.
Pasaron más de cuatro horas y llegamos a la cima de una montaña, donde una gran planicie le daba paso a unas cuantas edificaciones, era novedoso y elegante, sabía que no iba a coordinar dada mi condición de pobreza, pero yo tendría el poder, y todos esos pequeños bastardos que corrían de un lado para otro me tendrían que obedecer.
Charlie estacionó el pickup en un espacio demasiado reducido, tanto que salimos de lado entre los autos lijosos y de grandes marcas, camine junto a su brazo pero no me atreví a tomarlo como tantas veces, era obvio que él estaba decepcionado de mí, así que me limite a no pronunciar palabra alguna, me pare en la entrada del campamento, en la puerta había un arco enorme donde decías con letras doradas, AVE FENIX CAMPAMENTO DE VERANO.
Me sonreí un poco por lo irónico del nombre, todos los chicos en ese lugar lo tenían todo, o tal vez yo solo veía lo material pero cuando una no lo tiene es bastante, el camino que conducía a las oficinas estaba adoquinado, y por los costados había varias estatuas, unas mujeres hermosas y unos hombre para quitarle el aliento a cualquiera, estaba contemplando la estatua de un hombre grande y corpulento con el cabello un poco ondulado y de gran sonrisa, cuando un voz sonó a mi espalda.
___ Es el señor es uno de los fundadores de este lugar se llama Emmett Dale McCurty, vive en New York y no viene muy seguido por aquí. Hola me da gusto conocerte me llamo Demetri Volterra, soy el profesor de gimnasio, ¿Y tú eres? ---- el chico era guapo muy alto y corpulento su cabello muy corto y con un tatuaje en el brazo derecho algo así como unas serpientes enroscadas, sonreí un poco extendiendo mi mano para chocarla con la suya.
___ Un gusto conocerte Demetri yo soy Isabella Swan, y vengo fungiendo como tutora. ----- el me estrecho la mano sosteniéndola un momento, Jacob se lo comía con los ojos y estaba segura que si él pudiera le arrancaba la cabeza al pobre chico.
___ Un verdadero placer Demetri. ----- sonreí coqueta y me mordí el labio.
___ Creo que te llevare con la señora Cooper ella te dará los datos y todo lo que necesitas, síganme por favor. ----- mi papa se quedo parado un momento y llamo mi atención.
___ ¿No vienes papa? ----- le pregunte incomoda entre dientes.
___ No cielo es mejor que nos despidamos aquí. Es momento de que tú vueles sola. Y además nos queda un largo camino de regreso pero tengo el número de teléfono, yo te llamare encanto llegue a casa para que no te preocupes. ---- dio dos paso y me beso en la frente dándole una mirada a Demetri que me esperaba a unos cuantos pasos.
___ Nos vemos pronto Bella, ¿Te cuidaras verdad? ---- fueron la primeras palabras de Jacob desde aquella platica sobre sus sentimientos así que me dio un poco de gusto oír como se dirigía a mí.
___ Si te lo prometo. ---- pero antes de poder decir algo mas él me envolvió entre sus enormes brazos apretándome contra su pacho, mi rostro se perdió entre los pectorales de mi hermanastro y la verdad que podía oír su corazón latir a toda prisa, su respiración entrecortada, después se retiro un poco y me beso en cada mejilla, antes de girarse e irse sin mirar atrás, mi papa lo siguió sin decir nada y yo me quede como una tarada ahí de pie a mitad de un montón de gente desconocida sin la protección de nadie solo de mi misma.
___ ¿Tu novio supongo? ----- me pregunto Demetri a mis espaldas.
___ No es mi hermanastro. ---- le dije mirando sus ojos.
___ Vaya pues el reacción como el novio celoso. ---- una media sonrisa se dibujó en la comisura de sus labios, algo burlona por cierto.
___ Mira esta es la señora Cooper, ella te ayudara para que te sientas como en tu propia casa. ----- mire a la señora mayor con unos anteojos de fondo de botella, era muy pequeña y muy delgada, parecía tan frágil.
___ Hola cariño me puedes llamar Doris, eso de señora Cooper me hace sentir mas vieja de lo que estoy. ----- sonreí abiertamente y después de eso me sentí más confiada, ella me entrego tres expedientes y unos archivos de los que serian mis pupilos en los próximos tres meses, me decía que siguiera las reglas al pie de la letra y no tenía problemas para adaptar a los pequeños que se me eran asignados, al principio pensé que tendría a algunos niños como en el internado a mi cargo, pero aquí era diferente, me asignaron a una cabaña de dos plantas bella a decir verdad, tenía cuatro recamaras y en cada una de ellas nos instalaríamos incluyéndome, la señora Cooper me dijo que la mía estaba en el segundo piso pero que tuviera cuidado con los chicos pues ellos tendían a hacer trampa en cuanto una se retiraba a dormir, me dio mucha risa y puse mis cosas en la habitación que seria mía.
Tenía una gran cama con un cabecero estilo montana rustico y muebles color madera solo con un poco de barniz, un televisor y un reproductor de DVD, puse mis cosas en orden y baje a la cocina que permanecía sola, aun no llegaban mis niños, me prepare para llevar una lista de lo que me aria falta y de lo que estaba en las alacenas, pero grande sería mi sorpresa pues estaban repletas de pura comida saludable tal como yo me alimentaba, mi figura era lo más importante pues con mi sueño de ser una bailarían de ballet mi peso y condición eran lo primero en apariencia me veía mayor así que no tendría ningún problema para que me respetaran como la maestra.
Mi lista queda en blanco pues no necesitaba nada de nada, la puerta principal se abrió y un joven mayor entro dejando pasó a otros dos jóvenes más chicos, me quede parada en la puerta, sin saber que decir sin saber que como reaccionar.
___ Buenas tardes señorita Swan, soy Félix Demarco, y estos dos jóvenes son Erik York y Michael Newton, muy pronto llegara el tercero, así que preséntense y lleguen a ser unos muy buenos amigos, y ya lo saben chicos sean responsables y respeten a la señorita Swan. ---- dicho eso el salió sin despedirse siquiera cerró la puerta y yo me quede pasmada no eran “niños” era unos adolecentes, no terminaba de salir de mi asombro cuando golpearon a la puerta, de varios pasos llegue y al abrir me encontré con Demetri que llevaba a mi tercer proyecto así era como les decían ahí, pero para mí eran alumnos así que le di el pase, aunque al pasar junto a mi lo mire hacia arriba pues era muy alto al igual que los otros dos.
___ Te veo después, en la cena, tendremos una reunión de maestros y así podrás conocer a todos los demás. ---- solo respondí con un movimiento de cabeza y cerré nuevamente la puerta.
Como una profesional saque mis archivos y mire a los tres jóvenes que se situaban en diferentes partes del salón principal, eran grandes y pasados de peso más bien muy pasados de peso con los clásicos fierros bucales y llenos de agané, iba a necesitar toda mi experiencia en dietas y ejercicios para llegar a la meta de este condenado proyecto y sacar el ave fénix que cada uno de ellos llevaba dentro de entre las cenizas en donde estaban enterrados sus cuerpos y personalidad, mire nuevamente los archivos y mire sus nombres, así que tenía que familiarizarme con ellos.
___ Hola chico mi nombre es Isabella Swan, y yo voy a ser su tutora personal en los próximos tres meses, espero y podamos llegar a ser buenos amigos y respetarnos mutuamente. ---- ninguno dijo nada lo que tenían en las manos era más importante que yo en este momento, me llene de rabia como cuando Jacob me ignoraba así que camine rápidamente arrebatando lo que impedía que me prestaran atención, saque de sus manos dos teléfonos celulares y un Ipod los tres me miraron desconcentrados y yo con la autoridad que tenia les dije firme y segura.
___ Si tú tienes un celular vale más que me lo entregues en este momento, yo no soy la niñera de nadie, aquí la que manda soy yo, y si ustedes no me prestan unos minutos de su atención, tendrán castigos muy duros y eso no les va a gustar así que señor Cullen entrégueme su celular por favor. ---- de dos zancadas quedo a mi lado y me entrego el bendito aparato en mi mano que permanecía extendida, y pude verlo bien por debajo de la melena que le llegaba por debajo de los hombros, llenos de imperfecciones y con unas cuantas pecas, mas regordete que los demás y con su ropa muy desarreglada.
___ Muy bien chicos como ya nos vamos entendiendo les diere las reglas a seguir y no tendremos problemas.
Primera --- No habrá comida chatarra dentro de la cabaña.
Segunda --- No podrán salir de aquí, después de las diez de la noche.
Tercera --- comerán la dieta que se les asigne.
Cuarta --- No tendrán citas dentro de la cabaña.
Quinta --- si ustedes me ayudan yo les ayudo de lo contrario no podremos llegar a una meta.
Sexta --- Si uno de ustedes quebranta alguna de las reglas todos serán sancionados así que como grupo se tienen que apoyar. Y eso es todo lo que les diré por ahora, son diez reglas en total pero por lo pronto me conformo con que aprendan estas, vallan y encuentren sus habitaciones y nos vemos aquí dentro de una hora.
Nadie dijo nada ellos salieron en silencio del salón me quede acariciando el gran piano que había ahí, mis dedos recargaban unas cuantas teclas y se oía un sonido débil y suave.
___ Está un poco desafinado pero suena bien. ---- la voz dulce y aterciopelada mas bella que jamás había oído sonó detrás de mí, por donde se habían ido los chicos a sus habitaciones, así que supuse que se trataba de uno de ellos, me gire en mis talones y lo vi parado frente a mí con la cabeza baja y mirando a sus pies, era el chico Cullen con su horrible cabellera desordenada y revuelta, regordete como una bola de mantequilla y lleno de granos en su rostro, me acerque a él impulsada por el momento y levante su rostro tomándolo de la barbilla, sus hermosos ojos color verde esmeralda me taladraron mi interior, opte por sonreír y el intento hacer lo mismo dejando a la vista su horrible boca llena de ganchos los frenos bucales eran más feos que lo de los otros así que me borro la sonrisa que intentaba darle. Así que aquí empezaba mis vacaciones de verano en el campamento Ave Fénix.
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HOLA A TODAS COMO ESTAN
Espero que les guste este capi, intento por todos los medios seguir al corriente jajjajjajajja aunque mi mente está en todo menos donde debería les pido que se enamoren de esta historia como lo hicieron de las anteriores las cosas que pasaran son muy buenas así que iremos descubriendo todo acerca de nuestros protagonistas y de cómo sus vidas se enredan hasta quedar entre las cenizas.
Las quiero mis queridas lectoras y lectores por eso me esfuerzo para que cada una de las historias sea completamente diferente, y complacerlos con ellas, una vez más les pido sus comentarios y sugerencias son bienvenidas y gracias a las personas que amablemente me dicen que me ayudan con la horripilante ortografía que tengo jajajjajajaj sorry por eso una disculpa en general, pero esta soy yo no soy perfecta y si me aceptan tal cual soy gracias, así que no cambio creo que es mi sello personal mis faltad e buena ortografía jjaajjajaj
MIL MILLONES DE GRACIAS POR TODO
BESOS Y NOS SEGUIMOS LEYENDO EN EL PROXIMO
SU AMIGA DE SIEMPRE
SIV-LUNITA-SIV.
